Cuando a fines de 2014 Amazon lanzó un parlante inteligente para el hogar llamado Echo muy pocos entendieron de qué se trataba. Ahora el producto lidera una categoría que no para de crecer. ¿Qué es? Se trata de un parlante que funciona con un sistema de inteligencia artificial llamado Alexa que recibe órdenes mediante la voz humana. Por ahora funciona solo en los EEUU, en el Reino Unido y en Alemania. Ya existen más de 7 modelos diferentes de parlantes.
¿Para qué sirve? Alexa es un completo mayordomo personal que toma nota cuando al tanque del auto le falta nafta, maneja nuestra agenda, dice la temperatura y el estado del tránsito, nos hace escuchar el último disco de nuestra banda favorita, pide delivery de sushi, hace el pedido al supermercado y sabe cuántos goles hizo Messi en toda su carrera.

Pero ya no está solo. Google también se sumó a la categoría con su parlante Home y desde el año pasado Apple sumó el suyo, el HomePod, que funciona con Siri. También se anota lentamente en la pelea Samsung, con su plataforma de IA llamada Bixby que por el momento solo funciona con los Galaxy S8, S9 y los Note. Los coreanos lanzarían este año su propio parlante. Telefónica, por su parte, presentó en febrero a Aura, destinada a sus clientes de Movistar.
Veamos las cifras de crecimiento, según la consultora Strategy Analytics: en el primer trimestre de este año se despacharon 9,2 millones de parlantes inteligentes. Amazon, el creador de esta categoría, conserva por ahora cómodo el primer lugar: registró 4 millones de unidades pero Google lo sigue cada vez más de cerca, en segundo lugar, con un crecimiento del 700% en apenas un año. Pasó de 300 mil productos a despachar 2,4 millones de unidades.
El Google Home apareció recién a mediados del año pasado. Google es el rival más directo y peligroso que tiene Amazon porque maneja una impresionante cantidad de datos (Big Data) aportados por las búsquedas constantes de cientos de millones de usuarios de Android y los otros productos de la empresa como Gmail, Calendar, Maps, YouTube, etc.

Más abajo en la lista se ubica el gigante chino Alibaba con casi 8 puntos de mercado y Apple, que pocos meses después de su lanzamiento en octubre del año pasado, ya tiene el 6% con sus Home Pods.
Cuando el Echo de Amazon apareció sorprendió a toda la competencia. El asistente Siri del iPhone todavía no era masivo. Y aún no logra el éxito esperado porque, según analistas, uno de los grandes motivos sería que a los usuarios los inhibe hablarle a su celular en público. Cuando Apple lanzó su parlante, ya le había dado mucho tiempo de ventaja a Jeff Bezos, el fundador de Amazon (y el hombre más rico del mundo, según Forbes, con u$ 112 mil millones), quien siempre parece estar un paso adelante. En un reportaje que dio hace poco dijo que su trabajo consiste en inventar nuevas opciones que nadie haya pensado antes.
Ahora va por más. La estrategia de Alexa es abierta y transversal, porque quiere ser el sistema operativo de todos los dispositivos inteligentes del hogar que se conecten a Internet (la llamada Internet de las cosas), sean de la marca que sean. Es decir, poder manejar mediante la voz celulares de Apple, parlantes de LG, heladeras de Samsung, autos de Ford, lavarropas de Whirlpool, televisores smart, las luces, el aire acondicionado, etc. Lo está logrando gracias al ecosistema generado por aplicaciones desarrolladas por terceros (se llaman “skills” y ya hay más de 12 mil). Alexa se metió como un virus en millones de dispositivos inteligentes en el hogar.
La batalla por los asistentes de voz significa nada más y nada menos que una competencia por dominar una nueva interfaz que, de ser exitosa, reemplazará a la Web, a los sistemas operativos, a las pantallas táctiles de los celulares y hasta a la barra de búsqueda de google.
La carrera ya empezó. ¿Quién ganará?
